El Ángel

 

¿A cuenta de qué mecanismo psíquico sería posible adscribir los despiadados homicidios de C.R.P.? O quizás más: ¿por qué mata?

La película muestra a Carlitos como un adolescente algo ingenuo, en apariencia carente de malas intenciones, más bien algo tímido, quizás retraído… nada en los gestos parece sugerir un gusto especial por la maldad; sólo se interesa por el robo, lo entusiasma la idea de cometer fechorías… y una vez en la cancha, el pingo demuestra que tiene pasta para las andanzas.

Sin embargo, en la caracterización del personaje, no pareciera haber elementos que permitan identificar a uno de los criminales más celebres de la historia argentina con una figura del mal. Y no obstante, los homicidios por los cuales fue juzgado y condenado C.R.P. dan cuenta de una indudable falta de empatía con el dolor ajeno. Ahora bien, ¿es asimilable la falta de empatía con la crueldad?

En la escena que muestra el primero de los homicidios del “ángel del mal” hay un indicio de lo que va a desencadenarse a partir de allí: un discreto gesto de satisfacción vinculado al impacto del tiro en el cuerpo de la víctima. No hay texto sobre eso. No sabemos a qué responde el goce encontrado en esa escena. Si se enlaza con el ruido del disparo, con el hecho de que éste toque el cuerpo de la víctima, con la muerte inmediata del otro… no hay allí ninguna explicación.

Quizás ni Carlitos lo supiera. Lo que sí es posible conjeturar es que el enigma del primer homicidio no será sin consecuencias en su vida. Porque al enigma de la satisfacción se le adhiere una certeza: hay allí un goce. Y es necesario volver a producirlo. Se desencadena entonces una serie. Se hace preciso volver a producir el efecto-placer por la vía del disparo.

¿Qué es lo que mueve esa búsqueda? ¿Hay allí gusto por la crueldad? ¿Se trata de un sádico avanzando sobre el cuerpo de la víctima? ¿Hay un tratamiento de los cuerpos de sus víctimas o de los cadáveres que permita suponer algún ejercicio vinculado a algún desencadenamiento psicótico? Y sin embargo, en la película vuelven a aparecer indicios de una posible estructura psicótica que estuviera –en el despertar de la pubertad- comenzando a producir sus estallidos.

¿Y si la satisfacción hallada en los homicidios tocaba su cuerpo de algún modo? ¿Y si estos cumplían alguna función al servicio de aportar para el psiquismo alguna suerte de estabilización que impidiera la aparición por ejemplo de un delirio o de una alucinación? ¿Y si eso hubiera sido un modo de hacerse un cuerpo?

admin